El Mercado de los Duendes
De la mañana a la noche
gritan los duendes a troche y moche:
"nuestros frutos comprad,
venid, venid y comprad
membrillos y manzanas,
limones y naranjas
rollizas cerezas,
melones y fresas,
sonrosados melocotones,
arándanos silvestres
moras atezadas,
zarzamoras muy moradas,
piñas y garraberas,
albaricoques y frambuesas;
que alcanzan su madurez
en verano todas de vez;
la mañana llega
y la tarde se aleja,
comprad lo que el verano deja:
de la viña uvas frescas,
granadas hermosas y plenas,
dátiles y peras,
de fraile y claudias son las ciruelas,
también damascenas y de yema,
venid y probadlas, no os dé pena:
pasas y grosellas,
encarnadas bayas,
higos a raudales
cítricos meridionales,
dulces y lozanos:
comprad, alargad esa mano.